No hay forma de que les entre en la cabeza. Ni a la otrora cara culta del PP (hoy ministro por gracia divina), ni al Arzobispo patrón de la clerigalla, ni a los ultramontanos defensores de la puta vida a ultranza.
Nadie, ninguno en todo el orbe, se opone a que ellos se abstengan de abortar si así lo consideran.
Qué manía tienen, ¡coño!, con marcarle la senda a todo el mundo.
Incluyo a continuación una carta abierta escrita por un neurocirujano y dirigida al antiguo mirlo blanco del PP, el que una vez, dijeron, era el rostro progre de los fachas (antes de quitarse la careta), sobre su intención de prohibir el aborto en casos de malformación grave de los fetos.
¿Santitos para el cielo?
¿Votantes para el PP?
Hay una ley de vida, cruel y exacta, que afirma que uno debe crecer o, en caso contrario, pagar más por seguir siendo el mismo. Norman Mailler".
ResponderEliminarDebemos ser muy, muy pequeñitos, porque salvo unos pocos, siempre pagamos los mismos.................
Raquel