En los últimos días hemos advertido en las praderías anteriores a los acantilados, entre la playa de Usgo y la de Robayera, cómo se iban reuniendo más y más pájaros en un alto en el camino de su migración hacia el norte. La mayor parte corresponde a zarapitos trinadores, pero también acompañan agujas colipintas (en el centro de la fotografía) y alguna que otra collalba gris (al fondo a la izquierda).
En pocos días volarán a la Europa Septentrional como si fueran jóvenes de países en crisis. No sabemos si las aves llevan título de enfermeras, médicos o ingenieras, pero al menos ellas sí que volverán para el otoño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario