¡Oh, capitán, mi capitán!
En tu ausencia, tal como predijo este vigía, hubo motín a bordo
y el buque quedó desarbolado; a merced de los alisios.
Mas los amotinados no son los que se fueron en otro barco y hacia otros límites
sino los que allí quedaron, sobre la nave muerta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario