Observen ustedes a la estrella rutilante, su pose, su glamour, sus colores vivos casi versallescos y luego miren a la fotógrafa con su ropa gris sosteniendo a la vez, como una buena subalterna, la cámara con la que toma la imagen y el abrigo de la imaginaria. Observen este instante robado al tiempo. Piensen en las hormiguitas.
Y desconfíen siempre que puedan de las apariencias.
Todo lo grande significa poder, representa el poder. Lo pequeño tiene la verdadera escala de lo humano.
ResponderEliminarEl poder. El poder que todo lo abarca, que todo lo ocupa, que todo lo mancha. Buen día, José María.
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