Somos millones en esta isla errónea y apenas alguno sabe que llevamos vidas de náufrago

lunes, 3 de septiembre de 2012

Las sombras de lo que fuimos

Ayer subimos de nuevo a la Collada y, de nuevo, visitamos los restos de las trincheras olvidadas. La soledad nos acoge con la misma gravedad con la que  retiene entre sus dedos los hilos del pasado y de las vidas que allí fueron.
Aunque la soledad sea la hermana gemela del olvido.   

2 comentarios:

  1. Paso de decírtelo, mariano, porque últimamente estás de ego disparado, pero qué cojonuda la foto. Así que .nada que decirte entonces

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  2. No me exageres, compañero. Ni en lo de la foto ni, sobre todo, en lo del ego, que ya hubo en su tiempo quien lo utilizó como arma arrojadiza. Y ya se sabe que a los egos los carga el diablo.

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