Somos millones en esta isla errónea y apenas alguno sabe que llevamos vidas de náufrago

lunes, 20 de febrero de 2012

El vigía

Mi casa es un barco de Neruda con un vigía en lo más alto
y la proa de sus ojos al poniente.
Mi casa llena en la noche su velamen
con fugaces estrellas vagabundas
que extraviaron su camino entre Valparaíso y Singapur.
Mi casa es un galeón dormido en tierra esperando la marea.

4 comentarios:

  1. Chulazo el MAYO ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
    Raquel

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  2. Lo dices tú o pones tu voz en mayo?

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  3. Gracias,Raquel,por el piropo. Mayo se esponja de felicidad en su atalaya.

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  4. Hugo, ¿a tí que te parece?. A Mayo solamente le falta gritar "tierra" en cuanto la vea,

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