Somos millones en esta isla errónea y apenas alguno sabe que llevamos vidas de náufrago

lunes, 31 de octubre de 2011

Diario de Bolivia VI

Entramos en La Paz casi una semana más tarde que la marcha indígena que reclama la conservación de un territorio en el que se asientan los que protestan desde tiempo inmemorial, los Tipnis. Parece ser que el gobierno de Evo Morales tenía planificada una carretera que atravesaba dicho enclave, partiendo la selva en dos, y ya sabemos lo que eso significa.

En el camino desde Uyuni ya habíamos escuchado que el gobierno y los indígenas habían llegado a un acuerdo en el que declaraban los Tipnis territorio intangible (sic), o sea intocable.

Sin embargo algunos flecos debían quedar puesto que en nuestra primera mañana en la caldera de La Paz intentamos acercarnos a la Plaza de Armas, donde se ubica el palacio de gobierno y donde los indígenas acampan mientras se negocia, pero todos los accesos están cerrados por la policía.

Al día siguiente, por fin, unos amigos mexicanos con los que coincidimos en Potosí nos indican que ya se puede acceder a la plaza, con lo cual el acuerdo parece ya total.

Por la tarde acompañamos a la marcha en una manifestación de despedida. A los lados la gente de la capital saluda, lanza parabienes y aplaude.

Por fin, ante nuestra sorpresa, la marcha concluye en la puerta de la Iglesia de San Francisco, a donde van entrando la mayor parte de los indígenas manifestantes, mientras por los altavoces suena una voz típicamente eclesiástica que los recibe antes de dar comienzo una misa de celebración.

Y nosotros, incrédulos, hasta ahí. No más.

sábado, 29 de octubre de 2011

Diario de Bolivia V

Después de cuatro años, tras viajar a Chile, vuelvo a ver el volcán Licáncabur. Ahora desde la otra parte, vigilando la Laguna Verde. Luego, en la frontera de Bolivia con Chile, nos hacemos unas fotografías, un poco por nuestra nostalgia y otro poco por la nostalgia de Gise.

Por el Licáncabur no pasa el tiempo. A nosotros el tiempo nos va haciendo cada vez más extenso el pasado.

viernes, 28 de octubre de 2011

Diario de Bolivia IV

Antes de entrar al Salar de Uyuni el viajero se encuentra un cementerio de trenes como detenidos por el tiempo. En uno de los vagones oxidados alguien ha escrito una frase que parece acorde con el hálito de tristeza y soledad que el lugar y la chatarra despiden: "Asì es la vida"

martes, 25 de octubre de 2011

Diario de Bolivia III

El Tío es una especie de dios diablo que veneran los mineros de Potosí en las profundidades de cada mina del Cerro Rico. Luego, cuando salen a la superficie, cada uno de ellos vuelve a tener las creencias que considera oportunas. Sin embargo, dentro, en lo más recóndito, siempre hay un Tío caracterizado por su cara terrorífica y su pene enhiesto. Y alrededor, las ofrendas de la vida miserable del minero. Botellas de plástico, tabaco, hojas de coca, fetos de llama...

El Cerro Rico, un inmenso monte horadado que domina el paisaje y la vida de Potosí, una ciudad a 4.000 metros de altura, es como un gigante Tío para sus habitantes desde que en el siglo XV se descubrió plata en sus tripas.

Desde entonces, según cuentan, y a falta de estadísticas más fiables, aproximadamente 8 millones de personas han fallecido buscando mineral. Según Helen, la guía que nos llevó hasta el Cerro, aún hoy mueren tres o cuatro personas cada semana. También nos dijo, refiriéndose a una de las galerías, que por ahí salió suficiente plata como para pagar la deuda externa de toda América Latina. Sin embargo, la pobreza sigue estando presente porque, como muchos de sus habitantes, la plata también emigró.

Siempre se dice que el trabajo del minero es de los más duros que existen. Ahora, tras un recorrido de cuatro kilómetros por las galerías del Cerro Rico de Potosí puedo decir que los mineros allí viven en un infierno a la sombra del Tío, y ni las hojas de coca que abultan sus carrillos mientras trabajan sirven para escapar de su dominio.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Diario de Bolivia II

17-10-2011


La ciudad de Sucre tiene cuatro nombres: Sucre, La Plata, Chuquisaca y Charca.

La guía de aves que traemos tiene más de cien variedades de colibrí.

Imposible descubrir el nombre del que aletea frente a nosotros.

domingo, 16 de octubre de 2011

Diario de Bolivia

14-10-2011. Samaipata.


A partir de la una de la tarde va despejando poco a poco. Empleamos unas horas en un paseo por la parte alta de Samaipata. Al fondo selva y montañas que apenas cubre un velo de nubes.

En el trayecto vemos infinidad de aves desconocidas.

Una suerte de pájaros mágicos bailando a nuestro alrededor.

lunes, 10 de octubre de 2011

Pero no te olvides de mí.

Y aunque nos vayamos con el mínimo equipaje siempre nos dejaremos un sueño por el camino.
Y con suerte, muchas sonrisas y una lágrima.
O un viento volandero bajo los pies, que tal vez nos lleve al infinito.
Y al partir veremos alejarse los arrecifes, la oscura costa de nuestra infancia.
Y sabremos después que tras Isla Decepción se encuentra el Cabo de Buena Esperanza, desde el que, sin duda, se llega también a otras islas y a otras costas.
Y de derrota en derrota, en el horizonte advertiremos por fin la luz de un faro que aguarda.
Entonces será la hora del regreso. Porque todo viaje se inicia para volver a casa un día.




MCH

domingo, 9 de octubre de 2011

Librerías (21): España

Bolaños de Calatrava (Ciudad Real)

sábado, 8 de octubre de 2011

Cantautores

Llego a casa de mi madre con la intención de ver el segundo tiempo del partido de fútbol entre la República Checa y España tras una ajetreada tarde de recados y “carrefures”. Sin embargo, con el mando a distancia de la tele en la mano, me detengo en un programa de la Dos en el que un joven y barbado Luis Pastor canta aquello de “los tiempos están cambiando, están cambiando qué bueno, por mucho que lo llaméis no saldrá del agujero…” y luego escucho Al vent y L’Estaca y Al alba y “habrá un tiempo en que todos veremos una tierra que ponga libertad”. Y tanta canción se intercala con imágenes de un blanco y negro sucio y seco en el que unas veces predomina el rojo y el verde de esperanza y otras solamente el fiero gris.

Mi madre se sienta un rato a darme conversación. Me dice que esas canciones le suenan de cuando nosotros, sus hijos, éramos unos chavales. Y observa atentamente las imágenes de gente corriendo y de policías golpeando.
¡Cuánta gente presa, entonces, y nosotros sin enterarnos apenas de nada!, me dice. Y mira que yo me preocupaba porque tenía la sospecha de que vosotros estabais en "eso", recalca señalando las imágenes de las viejas manifestaciones (y cayendo en cierta contradicción con lo anterior).
Ahora lo sé porque veo “Cuéntame”.



jueves, 6 de octubre de 2011

Cita para salir despavorido


Si llevas leones a tu casa querrán quedarse a cenar.

(cita encontrada en el libro titulado "Libertad para los osos" de John Irving)

martes, 4 de octubre de 2011

Una rosa es una rosa...


PREGUNTA II


El hombre se detiene
en la esquina de la celda,
parece que habla solo,
pero no, hasta cuándo
le ha preguntado a una araña.
La araña, de inmediato,
se descuelga y baja
por el hilo que larga,
y parece que ese largo hilo es
la respuesta de la araña.


Joseba Sarrionandia.


...y un premio es un premio

lunes, 3 de octubre de 2011

Puertas al mar

Al igual que a Isaac Rosa, según comenta en su artículo de hoy del diario "Público", a mí también me ha surgido la oportunidad de apadrinar a un partido. Nos obligan a tan magnánimo proceder algunos que, desde el pedestal de ése su mundo imposible, se siguen empeñando en poner puertas al mar y en tomar medidas propias para una democracia interesada y de pacotilla. No es extraño que luego miren el mundo desde ese nivel en el que no hay nadie más que ellos (José Bono, por ejemplo, y sus indeseables ajustes para la soldada del desempleo).

Ruego atenta lectura del artículo que va a continuación por si alguien llega a considerar un justo motivo, en tiempos difíciles, para ser filántropo y demócrata real (o republicano, según pete).

http://blogs.publico.es/trabajarcansa/2011/10/03/apadrina-un-pequeno-partido/

domingo, 2 de octubre de 2011

Braña de los Tejos


Fotografía: Sol Valbuena (que cuando se pone, se pone).

Hoy hemos subido a la Braña de los Tejos desde San Pedro Bedoya (Liébana) y he tenido sensaciones encontradas. Ha sido gratificante reencontrarme con antiguos compañeros en estas lides, y también descubrir a otros nuevos.

Sin embargo, comprobar que tengo las articulaciones oxidadas e identificar la inmensa cantidad de músculos que pueden doler tras subir y bajar un "tourmalet" es harina de otro costal.

Hoy me hace daño hasta pensar en hacer propósito de enmienda. Vaya por Dios.

sábado, 1 de octubre de 2011

Dibujos de Viaje (11)

Torres del Paine. Chile.