Somos millones en esta isla errónea y apenas alguno sabe que llevamos vidas de náufrago

martes, 25 de septiembre de 2012

A moras

No hay nada como tirarte una temporada lejos del mundanal ruido, sin radio ni prensa ni internet, y con la televisión estrictamente racionada, para que todos se pongan de acuerdo en los esfuerzos inútiles: en algunos países musulmanes, venga algaradas por no sé qué insultos al profeta (un señor, por otra parte, que se murió hace muchos años, y al que ni le va ni le viene que le pongan a estas alturas como hoja de perejil en una peli que ni dios ha visto). O es que no tienen cosas más importantes en qué ocuparse respecto a sus deprimidas vidas o es simplemente manipulación.
En Holanda una invitación errónea a un cumpleaños en una red social se convierte en un multitudinario motín de jovencitos despistados. ¡¡Ya!!
Otro tanto ocurre en Madrid por la entrada masiva a un concierto de gratis y sin I.V.A.
Y para colmo alguien sabotea las luminarias del estadio del Rayo Vallecano en la previa del partido contra la eterna esperanza blanca del poder. ¡Jo!
Lo dicho. Un auténtico desperdicio.
Y es que, encima, con toda seguridad, ninguna de esas mentes adocenadas se ha planteado hacerle en el día de hoy una corbatita al Congreso, que es lo que toca si la Cospe da la venia (otra manipuladora bien profesional).
Se fue la Espe. Nos falta la Cospe.
 

1 comentario:

  1. En la vida,como en el ajedrez, las piezas mayores pueden volverse sobre sus pasos, pero los peones sólo tienen un sentido de avance.Juan Benet.
    Hoy estoy solita y desamparada, cachis no estar en Madrid ¡¡¡¡¡¡¡
    Raquel

    ResponderEliminar