Ayer se inauguró la exposición "Presos con Causa" en la Escuela de Náutica de Santander con un éxito de público tal que precisa, sin duda, una visita más tranquila durante el mes que va a estar expedita.
Con esta exposición se abre, efectivamente, una puerta más. Una de esas puertas que, un sistema presuntuosamente democrático como el que tenemos y soberanamente amnésico y desagradecido, desea dejar cerradas para que no se escapen sus vergüenzas.
Se debe agradecer a los impulsores de la muestra no sólo la oportunidad de conocer nuestro pasado común reciente, sino la posibilidad de ver y saludar de nuevo a mucha gente cercana.
Faltó el vino español, que tampoco fue necesario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario