La felicidad existe, no me cabe duda, pero tan adelgazada y triste, tan consumida e infeliz como un sueño de pobres.
La felicidad existe, pero tiene la cerviz cimbrada como arco iris.
La felicidad existe, pero es leyenda al calor de las hogueras que encienden de madrugada idealistas y vagamundos.
La felicidad existe en un trozo de cartón y en un paño de lágrimas.
La felicidad existe en un humilde minuto que sabe, a veces, como un siglo.
MCH
la Felicidad existe, pero somos tantos, que tocamos a poco.
ResponderEliminarRaquel