He decidido abandonar esa manía
de hacerme fotos con
gente,
aunque lo más probable
es que nunca me haga famoso
y jamás sea admirado.
He decidido dejar de hacerme fotos con
gente.
Es decir, en compañía de otros.
No vaya a ser que en una vuelta de tuerca
o en un giro inesperado
sea tan tonto de hacerme famoso,
y que cuando me muera,
en un ataque oportunista,
salgan como setas desde debajo de la tierra
fotografías mías con fulanos y con menganos
a los que contagie sin proponérmelo
esta mi hermosura declinante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario