Ayer recorrimos un tramo del Río Nansa en un fenomenal paseo entre los sauces y alisos de la orilla. La ruta entre Muñorrodero y Camijanes permite ejercitar de modo harto agradable un mecanismo demasiado tendente en ocasiones a la molicie y a la haraganería.
Mayo a punto estuvo de convertirse en un perro anfibio.
Pájaros, pocos. Es decir, muchos pero los oculta el bosque. Apenas mosquitero, mirlo acuático, lavandera cascadeña, tres busardos ratoneros haciendo travesuras en el cielo y un solitario cormorán.
LOS PÁJAROS ANIDAN
ResponderEliminarLos pájaros anidan en mis brazos,
en mis hombros, detrás de mis rodillas,
entre los senos tengo codornices,
los pájaros se creen que soy un árbol.
Gloria Fuertes
Qué criterio de pájaro inventado
ResponderEliminarconstruye la figura de la tarde
con una morosidad sin decadencia
como si en vez de ser el pájaro el que vuela en el aire
fuera el aire el que vuela en el pájaro.
Roberto Juarroz